miércoles, 22 de septiembre de 2010

////POR SPAM ENAMORADO\\\\



Lonstein, un poeta rabinito cosechador de hongos que aparece en el Libro de Manuel de Julio Cortázar:

 “las revoluciones binarias se condenan antes de triunfar porque aceptan la ley del juego, se deforman creyendo quebrarlo todo. Cuánta locura necesaria, locura inteligente y entradora que acabe por descolocar a las hormigas. Liquidar la noción de eficacia del adversario como decía Gene Tunney, porque mientras sea él quien la imponga nos condena a aceptarle sus cuadros semánticos y estratégicos. Habría que hacer como en aquel dibujo de Chaval en que se ve una plaza en el momento en que va a salir el toro, pero en vez del toro sale un tremendo gorila, y entonces qué te cuento que el valiente torero y su cuadrilla rajan con el culo a cuatro manos. Ahí está, es un problema de reflejos condicionados, negarse a aceptar las estructuras esperables y lógicas.

¡Viva el absurdo dentro de lo revolucionario¡ ¡Avanti payasos y malabararistas del mundo¡
PD. Honores para Ghava y a su Propaganda sinfónica.